Lali
Rochi y yo nos tomamos un poco de tiempo después de que Gaston
y Peter se fueran para desempacar algunas cosas y ordenar.
La mañana había
estado dichosa y me sentía como si estuviera en las nubes. Peter me había
besado dos veces hoy y cada vez sentía como si fuera a derretirme en sus
brazos. Definitivamente me gustaba el que hubiéramos pasado de amigos a más que
amigos.
Todavía estaba nerviosa, sin embargo. Nunca me había sentido
así con Pablo, ni siquiera de cerca. Cuanto más tiempo pasaba con Peter, más me
sentía como si estuviera entrando en una zona peligrosa. Las últimas tres
semanas sin ellos fueron un completo infierno y se sentía tan bien tenerlo de
vuelta en mi vida.
Rochi estaba actuando bastante tranquila. No estoy realmente
segura de lo que pasó con ella esta tarde. Gaston y ella se llevaron bastante
bien y sólo discutieron un par de veces, lo que era un alivio. Me preguntaba si
estaba preocupada por ir a la fiesta esta noche. Después de todo, la última
fiesta en casa de Peter y Gaston resultó ser bastante mala para Rochi.
En ese mismo momento, Rochi saltó cuando un mensaje le
llegó. Se levantó de un salto y agarró su celular al lado de la barra de
desayuno. Su rostro cayó inmediatamente.
—¿Qué pasa? ¿Es una mala noticia o algo así? —le pregunté
mientras caminaba hacia la cocina para agarrar una botella de agua.
—Oh, no, no… Eh, en realidad es de Jason. Parece que
aterrizó en Francia hace un rato. Sólo preguntaba cómo ha sido mi día. Dulce,
¿eh? —dijo Rochi con una pequeña sonrisa.
—Sí, qué dulce. ¿Le has dicho que vamos a la fiesta de Agus
esta noche?
—No iba a hacerlo. Quiero decir, no es mi novio, no tengo
que contarle todo lo que haga —replicó Rochi y se fue.
¿Qué demonios fue eso? Rochi estaba sentada en el sofá
escribiendo un mensaje de texto a Jason. Dios… estaba de mal humor.
—¿Qué diablos? ¿Estás bromeando? —gritó Rochi mientras me
miraba. Estaba regresando a la sala y me detuve en seco—. Santo infierno,
¿acaba de decirme que probablemente debería quedarme en casa? ¿Quién diablos se
cree que es?
Guau, creo que jamás he oído a alguien decirle a Rochi qué
hacer. Jason, la jodiste.
—¿Qué vas a decirle? —le pregunté mientras me sentaba a su
lado. ¡Escribía el mensaje tan rápido que casi podía ver el vapor saliendo de
sus dedos!
—Sólo le diré que no tiene ningún derecho a decirme qué
puedo y no puedo hacer. Quiero decir, mierda, acabo de pasar las últimas tres
semanas de mi vida dedicada a él al cien por ciento. Ahora se va a Europa y
espera que me siente en casa y lo espere. Le dije que lo siento, que no es como
funciono. ¡Si no le gusta, puede irse a la mierda!
Me reí. Una parte de mí pensaba que Rochi estaba esperando
que se fuera a la mierda. Su teléfono sonó de nuevo y leyó el mensaje. Todo su
cuerpo se hundió en el sofá. Oh, no… ¿Tal vez le estaba diciendo que se fuera a
la mierda?
—¿Qué fue lo que dijo, Rochi?
Rochi dejó escapar un suspiro y me miró. —Me dijo que tenía
razón, no tenía derecho a decirme lo que puedo y no puedo hacer y que debía ir
y pasar un buen rato.
—¿Y eso te hace infeliz? ¿No es eso lo que querías que
dijera?
—¡Por supuesto que sí! Quiero decir, por supuesto, sí.
Supongo que debería desearle un buen rato —dijo Rochi mientras me daba una
sonrisa débil.
Bueno… Me siento confundida.
—Sí, probablemente deberías. Es probable que ya te esté
extrañando.
—Dios… dijo que en la mañana se irán a su primera excursión
por lo que no podrá estar en contacto conmigo por unos días, hasta que pueda
conseguir señal. Qué lástima. De todos modos, creo que voy a ir a prepararme.
¿Tienes alguna idea de lo que te pondrás esta noche? —dijo Rochi.
Tuve que reírme. No había manera de que estuviera enamorada
de Jason, en absoluto. Yo estaría devastada si eso pasara con Peter.
—No, ni siquiera he pensado en ello. ¿Quieres ayudarme a
escoger algo?
—¡Demonios, sí! ¡Vamos a mi armario primero! —dijo Rochi
mientras me agarraba y me llevaba hasta su dormitorio.
Rochi y yo pasamos las siguientes dos horas escogiendo lo
que íbamos a usar, tomando una ducha y arreglándonos. Rochi llamó a Euge y le
dijo a qué hora iríamos a recogerla. Todavía no podía creer que Cande estuviera
saliendo con Agus. Rochi puso al tanto a Euge sobre Nico, pude oír a Euge
riendo a través del teléfono. Estaba bastante segura de haber oído la palabra
gigoló en alguna parte.
Peter me había enviado tres mensajes de texto desde que
volvió a casa. El primero ponía que había llegado a casa sano y salvo y que
estaban preparando la casa para esta noche. El segundo decía que pensaba en mí
y el tercero que no podía esperar para sostenerme entre sus brazos. Sentí el
calor en mis mejillas mientras leía el último.
¿Todo esto era real? A veces siento que voy a despertar para
descubrir que todavía estoy viviendo en casa con mi madre y Peter nunca existió.
—¿Estás lista para irnos, chica? ¡Porque yo estoy lista para
la fiesta! No he estado en una fiesta desde… bueno… joder desde la última
fiesta de Gaston —dijo Rochi con una sonrisa.
Comencé a reírme al ver cuánto había mejorado el estado de
ánimo de Rochi en comparación con el de hace unas horas.
—¡Estoy lista, vamos!
Rochi llevaba una mini falda vaquera con una camiseta sin
mangas de color rosa junto con sus botas de vaquero de color rosa. Llevaba el
pelo recogido en una cola de caballo y tenía un sombrero vaquero que combinaba
con sus botas. Yo llevaba un vestido corto negro con botas de vaquero simples.
A diferencia de Rochi, que poseía diez pares de botas de todos los colores,
opté por sólo un par de botas marrones. Decidí recoger mi cabello también, ya
que estoy segura de que iba a pasar la mayor parte de la noche en el baile del
patio trasero.
—Oh, Gas me envió un mensaje pidiendo que lleváramos vasos
de plástico, por lo que tenemos que parar en el supermercado para comprarlos
—dijo Rochi mientras hacíamos nuestro camino a su Jeep.
¿Estaba saltando?
—Entonces, ¿qué hizo que tu estado de ánimo mejorara, Rochi?
—le pregunté mientras me subía al Jeep.
Rochi echó la cabeza hacia atrás y se rió. —¡Voy a una
fiesta en lugar de a una maldita cena en el club de campo! ¡Dios, amo a Jason,
pero tiene que relajarse un poco! Pero bueno… mientras que los gatos están
lejos… los ratones se divierten —dijo Rochi con otra carcajada mientras movía
las cejas de arriba abajo.
Después de que recogiéramos a Euge y luego compráramos los
vasos para Gaston, terminamos llegando a la casa de Peter alrededor de las
siete cuarenta y cinco. Rochi estacionó detrás de la camioneta de Gaston. Tan
pronto como entramos por la puerta principal, Peter me me abrazó y levantó para
besarme. No estoy segura del por qué, pero cada vez que lo hacía, me hacía
reír.
—¡Dios, me encanta el sonido de tu risa! —Me bajó y dio un
rápido beso en los labios. En el momento en que me dejó, me sentí decepcionada.
Dios mío, tenía que calmarme. No podía estar actuando de esta manera,
necesitando más y más de él cada vez que lo veía. Sin embargo, me habría
gustado un mejor beso.
Peter me agarró de la mano y llevó a la cocina, donde Gaston,
Agus, Nico y otro chico al que nunca había visto antes hablaban. Peter tomó una
cerveza de la nevera y me la entregó después de abrirla. Luego me presentó a su
amigo.
—Maxi, esta es Lali, Lali este es Maxi. —Estiré la mano para
estrechar la suya y nuestros ojos se encontraron. Guau… tenía los ojos verdes
más increíbles. Traté de alejar mi mano, pero se aferró a ella unos segundos.
La forma en que me miraba me hizo sentir instantáneamente incómoda. Me miró de
arriba abajo y, finalmente, soltó mi mano.
—Lali, Peter me ha hablado mucho de ti. Es un verdadero
placer conocerte por fin —dijo mientras me sonreía con una sonrisa que dejaría
a cualquier chica a sus pies.
Miré a Peter, que observaba todos mis movimientos. —Espero
que todo fuera bueno.
Oh, Cristo. ¡Qué respuesta tan estúpida!
Maxi echó la cabeza hacia atrás y se rió mientras se pasaba
una mano por su rubio cabello. Era musculoso, pero no como Peter o Gaston.
—¿También juegas fútbol en la universidad? —le pregunté
mientras Peter se acercaba a mí y ponía su brazo alrededor de mi cintura. Al
instante, sentí las mariposas despegar en mi estómago, su contacto enviando una
onda de calor entre mis piernas. Le rezaba a Dios que no me sonrojara. Por una
vez, me gustaría no mostrar en mi rostro lo que el toque de Peter me hacía.
Maxi me sonrió e inclinó la cabeza mientras me miraba. ¿Qué
demonios? Miró la mano de Peter descansando en mi cintura y luego a mí.
—No, querida, no juego fútbol para la universidad. Sin
embargo, juego béisbol. ¿Te gusta el béisbol, Lali?
¿Querida? De acuerdo… ¿Por qué la forma en que me habló me
hizo sentir toda rara?
—Eh, supongo que sí, pero realmente sólo veo fútbol, lo
siento —le dije con un encogimiento de hombros.
Maxi soltó una carcajada y miró a Peter. —Qué afortunado
hijo de perra eres. —Me miró de nuevo—. Puede que hagamos que te guste el béisbol
ahora, ¿no, Lali?
Sólo sonreí; no sabía muy bien qué responder. Peter se
inclinó y me susurró al oído si quería alejarme y asentí. Todo lo que quería
hacer era alejarme de este tipo. Me pregunté si Peter había notado la forma en
que me miraba. ¡Este tipo me asustaba!
Peter tomó mi mano y me llevó a un lugar al que no esperaba
ir… su dormitorio. Mi corazón empezó a latir con fuerza y mi cabeza empezó a
girar. Cuando abrió la puerta y me llevó dentro, sentí que iba a dejar de
respirar.
¡Oh, Jesucristo! No creía que iba a dormir con él, ¿cierto?
Antes de que pudiera abrir la boca, Peter me tuvo en sus brazos.
—No es eso, Lali, cariño. Sólo te traje aquí para darte un
beso apropiado. —Pasó una mano por mi cabello y la llevó a un lado de mi
rostro. Dio vuelta su mano y la deslizó de arriba abajo por mi costado. Todo lo
que podía sentir era una sensación de hormigueo en todos los lugares por los
que su mano pasaba. A continuación, levantó las dos manos y ahuecó mi rostro.
Inclinó mi cara hacia arriba y sonrió con esa sonrisa torcida que tanto me
gustaba. Juraba que sentí mis rodillas temblar. Se inclinó y rozó sus labios
contra los míos cuatro veces, lo que me estaba volviendo loca.
—Más…
Sentí la sonrisa de Peter contra mis labios.
—Más, ¿eh? —preguntó mientras soltaba una pequeña carcajada.
—Sí, Peter, por favor… necesito más.
Lo siguiente que supe fue que los labios de Peter estaban de
nuevo en los míos y su lengua buscaba entrar en mi boca. La abrí y le permití
entrar. Movió su mano a la parte posterior de mi cabeza y profundizó tanto el
beso que me sentí como si todo el aire estuviera siendo sacado de mi cuerpo.
Lentamente, me apoyó contra la pared. Gracias a Dios, porque necesitaba que
algo me ayudara a mantenerme de pie ya que mis piernas iban a fallarme en
cualquier instante.
Dios, no quería que se detuviera nunca. La forma en que me
hacía sentir era increíble. Me sentí… apreciada. Cuando finalmente separó sus
labios de los míos, abrí lentamente los ojos para mirarlo. Sus hermosos ojos azules
miraban hacia los míos. Poco a poco, una sonrisa cruzó su hermoso rostro. No
pude evitar sonreírle de vuelta.
—¿Eso estuvo mejor, señorita Esposito?
Dejé escapar una risita. —Sí… Señor Lanzani. Me ha cautivado
satisfactoriamente.
Peter levantó su dedo índice y delineó la línea de mi
mandíbula y luego lo pasó por mis labios. Todo mi cuerpo temblaba y el dolor
entre mis piernas se hizo más fuerte. Todo lo que quería hacer era juntar las
piernas para aliviar el dolor.
—Me alegra saber que te he cautivado cariño. Pensé por un
momento que alguien más podría estar tratando de hacer lo mismo —dijo mientras
le daba un golpecito a mi nariz con su dedo.
¡Se dio cuenta y por eso me trajo aquí! Quería lanzarme a
sus brazos de nuevo y rogarle que me besara una vez más. Quería olvidar todo lo
sucedido con el tipo coqueteando conmigo frente a él. Todo lo que quería ver
era los hermosos ojos de Peter mirando los míos.
—¿Estás lista para una fiesta?
—Sólo si me prometes bailar conmigo toda la noche —dije con
una sonrisa.
—¡Hecho! —Peter agarró mi mano y me llevó a la puerta de su
dormitorio. Me dio la vuelta y estrelló mi espalda contra la puerta, besándome
profundamente una vez más. Cuando apartó sus labios de los míos, me faltaba el
aire.
—Eso es para que no te olvides quién te ha cautivado —dijo
con un guiño. Me alejé de la puerta para que pudiera abrirla. La cabeza me daba
vueltas de nuevo, pero esta vez, en el buen sentido. Mientras salíamos de la
habitación de Peter y atravesábamos de la sala de estar, sentí unos ojos
mirándonos. Miré hacia la cocina y vi a Maxi mirándonos a Peter y a mí caminar.
Por la forma en que sonreía parecía como si estuviera tratando de mirar dentro
de mi alma, lo que envió un escalofrío por mi espalda. Rápidamente giré la
cabeza y miré a Peter, que sonreía de oreja a oreja mientras nos conducía
fuera, hacia la música.
Una vez que salimos, el aire fresco se sentió increíble.
Miré a mí alrededor y vi a Cande, Rochi y Euge bailando. Todas parecían
felices, lo que me hizo sonreír. Gas había salido por la puerta de atrás y
señaló unas sillas para que Peter y yo nos sentáramos. Aún no había bebido un
trago de la cerveza en mi mano.
—¿Quieres ir a bailar con tus amigas, Lali? —preguntó Peter.
—No, sólo quiero quedarme aquí, contigo. —Lo siguiente que
hice fue probablemente lo más audaz que he hecho en toda mi vida. Sobre todo
porque mi hermano estaba sentado justo al lado. Peter se sentó y me senté en su
regazo antes de acobardarme. Creo que Peter estaba tan sorprendido como mi
hermano. Tomé un trago de mi cerveza y luego sentí algo… Oh… Oh, guau… ¿Yo
provoqué eso? Detuve la cerveza justo en mis labios cuando sentí a Peter
acomodarme en su regazo. Gaston estaba ocupado mirando bailar a todos, por lo
que no notó a Peter inclinarse y susurrarme al oído.
—Lo siento, cariño. No esperaba que hicieras eso, y como que
tiene mente propia.
Giré la cabeza de golpe y miré a Peter. ¿En serio acababa de
decirme eso? ¿Acababa de decirme que lo puse duro? Me eché a reír y me incliné
para darle un beso directamente en los labios. Con Gaston o sin él… quería que Peter
supiera cómo me sentía por él cada segundo del día.
—Jesucristo… ¿Puedes parar, Lali? ¡Puedo verte sentada en su
regazo, pero no succionando su cara todo el maldito tiempo!
Otro capítulo mas porfavooor. Esta novela me encanta!!! Gas celoso es lo mas y Peter tambien!! Los amo proofundamente a laliter ♥ otro cap mas, no nos puedes dejar asiiiiiiii
ResponderEliminarSon como muy tiernos me derrito de ternuraaa
ResponderEliminarMe encantaa
Mass
jsjajjajajja seguilaaaaaaa
ResponderEliminargas celoso jajaja
massssssssssss
Massssszzz
ResponderEliminarJaja Gasse puso celoso !!!
ResponderEliminarMe encanta verlos así a Peter y Lali
Seguila !!!