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domingo, 29 de diciembre de 2013

Capitulo 2

Capitulo 2


No tenía que ser registrada, e incluso me dieron una carta para mostrar en la puerta, para cuando llegara de aquí en adelante. Las cosas se volvían más suaves. Incluso Fran me sonrió una vez. Después del almuerzo, la Sra. Mary me envió al tercer piso, donde se encontraban la mayor parte de las habitaciones. Era fácil olvidar la casa de quién limpiaba. 

No tenía amigos que me contaran sobre el trabajo. No pensaba en el hecho de que me hallaba en las habitaciones donde la estrella adolescente más caliente en el mundo estaría durmiendo todo el verano, lo que, en realidad, no era un tan gran trato. Entré en su habitación y di vueltas alrededor. 
No era la típica habitación de chico adolescente. Se veía tan confortable que me pareció extraño.
Una pared tenía bates y pelotas firmadas con diferentes firmas, mientras que algunos sólo se veían en buen estado. Los jerseys que debe haber usado en la infancia, estaban colgados en las paredes con orgullo. Fácilmente podía imaginar al pequeño niño que había visto en las fotografías ayer, vistiéndose y jugando a la pelota en la ciudad como un chico normal. Hice una inspección más cercana y encontré imágenes de uno de los equipos en los que él había jugado. 
En las más antiguas, me esforcé para ver cuál de los pequeños niños era la actual famosa estrella de rock. Cuando parecía tener diez u once años, lo identifiqué fácilmente. Los jerseys y las imágenes habían sido puestas en orden por año a partir del jardín de infantes hasta la edad de trece años, luego se detuvieron. Había sido cerca de un año o un poco antes que recordaba haber oído su nombre por primera vez en la radio. Pareció llevar una vida normal hasta el momento en que el sello discográfico lo descubrió.
El espacio arriba de su cama lo apartaba de la habitación de un chico normal adolescente. Guitarras de todas las formas, tamaños, y colores estaban colgadas en las paredes. Muchas de ellas autografiadas; algunas brillaban por ser tan nuevas. Una parecía tener oro verdadero en ella, que no sería de extrañar si así fuera. Me puse de puntillas y la examiné más de cerca.Decia Fender en ella. Continué examinando las firmas de las guitarras más caras. Recorrí mi dedo sobre el nombre Jon Bon Jovi y sonreí. Aparentemente, incluso una estrella de rock tiene ídolos. En el centro de todas las guitarras colgaba una pequeña, desgastada. El hecho de que estuviese en el centro de toda su colección, hacía obvio que debe haber sido la primera y la que más amaba.
 Eché un vistazo hacia la puerta para asegurarme de que nadie estuviera afuera, y luego me puse debajo de la pequeña guitarra y me imaginé cómo todo había empezado. No era una loca fan pero ver algo que fue responsable de estimular un sueño parecía casi sagrado en cierto modo. Mi carro de limpieza sin tocar se encontraba cerca de la puerta, y sabía que necesitaba ponerme a trabajar. No quería aprender cosas nuevas, cosas personales sobre él. Lo quería a él, superficial e intocable a mis ojos. Sabiendo que una vez fue lindo, un pequeño niño con rizos castaños oscuros y una sonrisa que algún día podía causar un frenesí le hacía parecer más real y no tan divino. Necesitaba mantener mi interés en él al mínimo. Rápidamente me moví por la habitación sacando el polvo y barriendo, y luego limpié las caras maderas. Decidí que sería mejor terminar con esta habitación rápidamente antes de que me encontrara con cualquier otra cosa que me haga imaginarlo como el pequeño niño de las fotos
 Concentré mis pensamientos en el futuro y bloqueé los otros acerca de Peter Lanzani.
—Lali, ¿Terminaste ya? La familia ya llegó, y tenemos que ir a los cuartos de empleados —dijo Fran desde la puerta.
Puse mis artículos de limpieza de vuelta en el carro y me dirigí hasta la puerta dónde se hallaba una muy nerviosa, Fran.
—Claro, acabo de terminar.
Fran asintió con la cabeza y se dirigió hacia el ascensor, en el que viajaba el personal de la casa, de un piso a otro, sin ser vistos por la familia. Fran se apresuró al entrar una vez que se abrió, y empecé a seguirla cuando una botella de limpiador de cristales se cayó del carro. Saqué un pequeño trapo y recogí la botella del suelo. Limpié lo que había derramado lo mejor que pude.
 —Rápido, por favor —Fran llamó, con un tono de ansiedad desde el interior del ascensor.
La familia debía ser dirigida al piso de arriba. Me puse de pie, y una sensación de hormigueo corrió a través de los pelos de mi cuello. Sorprendida, me di vuelta y lo vi de pie allí, mirándome.
 Ya no era el pequeño niño de cabellos rizados, en su lugar, estaba la famosa estrella de rock. Me congelé sin saber qué hacer, ya que mi presencia fuera reconocida tan pronto, no era algo que la Sra. Mary quería. Una sonrisa apareció a través de su ridículamente sexy cara, el calor quemaba en mis mejillas, y aparté la mirada, empujando el carro en el ascensor. No parecía estar enojado de que una adolescente trabajara en su casa. Su sonrisa parecía divertida. Fran frunció el ceño cuando le eché un vistazo, pero no dijo nada. Puse mi carro lejos y fui a informar a la cocina que ya había terminado arriba. La Sra. Mary tenía las manos en las caderas, esperando que llegáramos. Una conversación silenciosa ocurrió entre Fran y la Sra. Mary. Después la Sra. Mary asintió, sacó algo de la mesa y me entregó ropa doblada de color negro.
—Todos usan uniformes cuando la familia está en la residencia. Además, ya no limpiarás mas la casa, me vas a ayudar en la cocina y ayudarás al Sr. Greg en los jardines. Sin embargo, esta noche te necesito para servir la cena. La Sra. Lanzani ha pedido que todos los sirvientes sean vistos de apariencia atractiva por la familia e invitados. William, el joven que contraté para ayudar a Gaston en el servicio de la familia, llamó para avisar que estaba enfermo hace unos diez minutos, y tú eres todo lo que tengo. Has demostrado ser una gran trabajadora, y pareces tomar en serio el trabajo. Tú edad me preocupa, ya que el amo de la casa está cerca de tu edad y es un ídolo en los ojos de la mayoría de las chicas. Mi instinto me dice que significa poco para ti. Espero que continúes mostrando esa madurez.
En realidad no sabía qué decir después de todo lo que dijo, así que sólo asentí.
—Bien. Ahora, tienes que usar esto todos los días. Tengo dos más hechos de tu tamaño, y tienen que ser dejados aquí cada noche para ser lavados y planchados. Asegúrate de seguir entrando por el mismo lugar y de inmediato te cambias en el cuarto de lavado. Ahora, necesito que me ayudes a comenzar a preparar la cena antes de ponerte la ropa. Tienes que estar limpia y ordenada para cuando sirvas.
En las siguientes dos horas, corté, rebané, agité, y rellené todo tipo de carnes y vegetales. Por el momento, la Sra. Mary me dijo que fuera a cambiarme ya arreglar mi cabello, el agotamiento llenó mi cuerpo. Me puse una falda negra, que llegaba arriba de mis rodillas, y una blusa blanca con botones y cuello redondo. Me puse un delantal negro sobre mi blusa y falda. Tomando mi cabello suelto, coloqué mis rizos en lo alto de mi cabeza. Me lavé la cara y las manos y suspiré viendo mi cara reflejada en el espejo.
 El rostro de mi madre me consiguió un trabajo como servidor esta noche, pero mi personalidad reservada ganó la confianza de la Sra. Mary. Cuando los ojos de mi madre brillaban con picardía, los míos se encontraban serios y reservados. La sonrisa de PeterLanzani me deslumbró tanto como lo hizo en las millones de fotos que había visto en revistas y en posters. Sin embargo, no significaba que yo sería lo suficientemente tonta como para ser atraída por él, como el resto del mundo. Con un profundo suspiro, abrí la puerta y volví a la cocina, donde la Sra. Mary esperaba.
—Bien, ahora, recuerda, tú te sitúas en el frente del amo Peter en el momento exacto en que Gaston esté… —saludó a un hombre alto y joven que aún no había conocido—. Situado frente a la Sra. Lanzani Ustedes serán los únicos que estén en la mesa esta noche. El Sr.Lanzani y Pablo llegarán mañana, por lo que esta noche, ustedes dos serán los únicos sirviendo. —Asegúrate de estar en silencio detrás del amo Peter mientras él come y seguir los pasos de Gaston. Él te ayudará con cualquier cosa con la que no te sientas segura. Desvié la mirada hacia Gaston quien parecía ser sólo unos pocos años mayor que yo, probablemente en la edad universitaria. Su cabello rubio arenoso y sonrientes ojos verdes inmediatamente me relajaron. Me tendió su bronceada mano y sonrió.
—Gaston Hardy.
 Deslicé mi mano en la suya, y él la sacudió.
-LaliEsposito. Asintió, sin dejar de sonreír, y tomó la bandeja.
—Miré tu valiente desempeño ayer cuando aseguraste tu trabajo aquí. Me sorprendió cómo tus ojos pasaron de nerviosos a determinados en menos de un segundo. — Tomó la bandeja delante de él, sonreí y levantó el set de bandejas delante de mí. —Puedes seguirme… desde que sirva la comida de la Sra.Lanzani —
Me dio un guiño antes de girarse e ir en dirección a la entrada del comedor. La gran sala no era nueva para mí. Había limpiado los pisos esa mañana. Gaston tomó su lugar detrás de la Sra.Lanzani, que se sentaba a espaldas de la entrada. La alarma natural en mi cuerpo me avisó cuando caminaba alrededor para estar detrás de Peter, quien se sentaba en la cabecera de la mesa. Miré a Gaston para que me guiara. Asintió con la cabeza, y pusimos las ensaladas en la mesa exactamente en el mismo momento. Di un paso atrás Gaston asintió para que me quedara al lado de él, así que lo hice.
—Todavía no entiendo por qué Papá está haciendo ir a Pablo a la entrevista en Yale, si él no quiere ir allí. —La voz de Peter sonaba tan suave que parecía casi irreal. Me sentí como si hubiera entrado a una película, y me quedé observando la escena delante de mí.
—Tu hermano no sabe qué es lo mejor para él. Tiene el cerebro para ser algo más que el hermano menor de PeterLanzani. Puede hacer un nombre por sí mismo, si sólo se centrara en ello, en vez de pasar el tiempo jugando con el mercado de valores. Su cabeza para los números se está desperdiciando. Peter levantó la mirada hacia mí y pareció sonreír antes de dirigir de nuevo la mirada hacia su madre.
—Los dos van a empujarlo lejos. Estás en lo correcto, él es inteligente y no necesita que pienses por él. La Sra.Lanzani soltó una corta y dura carcajada.
—Y tú no estarías dónde estás hoy si yo no te hubiese presionado tan duro. Todo lo que querías hacer era jugar béisbol con tus amigos y tocar en una banda de garage sin nadie con talento, exceptuándote.
 Peter suspiró, tomando un trago de su agua con hielo, y se volvió hacia su madre. —Suficiente, Mamá, no empieces a hablar mal de los únicos amigos verdaderos que he tenido.
La Sra.Lanzani miró hacia atrás, y Gaston tocó mi mano para llamar mi atención hacia él y la razón por la que me encontraba ahí. Dimos un paso hacia delante, al mismo tiempo, removiendo los platos de ensalada de losLanzanis.
—¿Podemos conseguir alguna cosa que no sea agua para que beban con su comida? —preguntó Gaston con un encantador acento sureño.
 Me encontré con sus ojos una vez más mirándome. Luché contra la tentación de permitir que mis ojos miraran en la dirección de Peter.
 La Sra.Lanzani suspiró. —Supongo que una copa de Merlot no debería herirme —miró a su hijo y alisó la servilleta en su regazo como si tratara de decidir—. Tráeme una copa del Merlot que tenemos en la bodega.
Peter se inclinó hacia atrás, y podía ver que seguía mirándome. Por lo tanto, tomé una calmada respiración y lo miré.
—Si pudiera tener un vaso de té helado dulce de la Sra. Mary por favor. Asentí y me resistí de regresarle la sonrisa.
—Sí, señor — respondió Gaston.
Dio un paso atrás y movió su mano por lo que me dirigí de regreso a la cocina. Salí del gran comedor e inmediatamente tomé una profunda respiración. No me había dado cuenta de lo angustiante que podía ser. Tan pronto como entré en la cocina, Gaston me sonrió.
—¿Qué?¿Lo arruiné?
Gaston negó con la cabeza, y un mechón de pelo rubio cayó en sus ojos.
—No, estuviste genial. Ahora vamos a buscar la sopa de cangrejo, antes de que la Sra. Mary tenga un ataque. —Se giró hacia la ama de llaves—. Sra. Mary necesitamos el Merlot de la bodega.
La Sra. Mary le entregó la botella ya abierta junto con un vaso.
—Ya lo había pensado, y aquí está el té dulce de Peter. —Yo me encargo de las bebidas — dijo Gaston. Me sentía demasiado agradecida como para preguntar por qué. Sólo asentí y lo seguí por el pasillo hasta el comedor. Justo antes de que entrara, Gaston se volteó a mirarme. —Ignora que él te está mirando. Eres un placer para los ojos. No puedo culparlo, pero si quieres mantener este trabajo, trata de mantenerte invisible. —Guiñó un ojo y luego abrió la puerta.
Mi objetivo en la vida era volverme invisible. Pensé que había estado tratando de hacer eso. Aparentemente, necesitaba esforzarme más.
—Tengo la intención de tener un montón de tiempo para relajarme en la playa. Me gusta el acceso a las playas privadas que tenemos aquí y la idea de ser capaz de relajarme sin que nadie intente hablar conmigo, conocerme, o conseguir que firme un autógrafo es algo que he estado anhelando por un año. Necesito un descanso. Sé que Gregory odia la idea de que no esté disponible por tres meses, pero lo necesito para mi cordura. —Peter me miró mientras colocaba el plato de sopa frente a él—. Gracias — susurró.
—Yo también quiero que tengas un descanso Gregory piensa que un poco de tiempo en frente de tus fans, este verano, seria genial para RP Quizás podrías hacer un concierto en la playa, o sólo ir a algunos estrenos de películas. Peter negó con la cabeza
—De ninguna manera, Mamá. Me niego que se sepa que estoy aquí. Elegí Alabama por qué no es una zona altamente poblada. Mejor aún, esta pequeña isla es privada. Voy a considerar algunos estrenos de películas, pero nada más. No te voy a presionar más.
 Peter continuó comiendo, y yo estaba junto a Gaston mirando por la ventana y al bol de Peter esperando el momento en que tendría que quitarlo. Miré a Gaston, y se encontró con mis ojos con una sonrisa. Él era todo negocios y me di cuenta de que quería que lo hiciera bien aquí. Había hecho un amigo. Gaston tocó ligeramente mi brazo y dio un paso adelante. De inmediato lo seguí y levantamos los boles.
—¿Más té dulce, señor? Peter me miró y deslizó su mirada hacia Gaston.
—Sí, por favor. En el vaso de la Sra.Lanzani quedaba a lo más un trago.
 Gaston otra vez dio un paso hacia atrás y me permitió salir primero. Hicimos la misma rutina que antes. Una vez en la cocina, recogimos las bandejas ya preparadas con las más ricas y exóticas comidas que jamás había visto.
 —Guau, seguro comen un montón.
—La SeñoraLanzani raramente prueba su comida hasta el momento, y mi conjetura es que apenas tocará esto.
 —Él come todo lo suyo.
—Sip, pero él es un chico en crecimiento.
Me reí con la imitación de la Sra. Mary que hizo Gaston, recogí la bandeja, y lo seguí por el ya familiar pasillo. Una vez dentro, coloqué la comida frente a Peter, otra vez, y Gaston colocó el té dulce por mí. Peter y su madre comieron en silencio esta vez. Ocasionalmente, sentí que él me miraba, y un breve toque de la mano de parte de Gaston que sin duda me recordaba que necesitaba parecer invisible. Nunca miré esos curiosos ojos azul acero. Madre e hijo intercambiaron unas casuales palabras, pero la mayor parte, comieron en silencio. Finalmente, después de lo que pareció una eternidad, inspeccioné a Peter para ver si él había finalizado, y nuestros ojos se encontraron. Traté de mirar lejos, pero sus ojos tenían un toque de risa. Me quedé mirando a mis pies, y Gaston me apretó el brazo. Me impresionó. Lo miré, y asintió para que tomáramos los platos. Limpiamos los lugares en frente de ellos al mismo tiempo, y caminé hacia la puerta.
—No voy a comer el postre —dijo la Sra.Lanzani a Gaston—. No me gusta dejarte comiendo solo, pero estoy agotada. Estaré en mi habitación si me necesitas. Peter se paró cuando su madre dejó la mesa. Una vez que se fue, se sentó otra vez.
—Me encantaría el postre. —Nos aseguró… o me aseguró a mí. Gaston asintió.
 —Sí, señor —dijo en su tono serio, y nos fuimos. Una vez en la cocina, Gaston colocó su bandeja. —Bien, esto es raro. Se supone que tienes que tomar su plato, y desde que su madre se fue, no tengo razón para volver. Yo podría ir en tu lugar, lo que sería la mejor idea, pero me temo que se enojará. Te ha notado, y sé que era bastante inevitable que lo hiciera, pero esperaba que ya que es famoso, no prestaría atención a otra cara bonita.—Gaston suspiró, apoyó su cadera en la mesa y cruzó sus largas piernas
— Estoy dejándote esto a ti.
—¿A mí?
—¿Qué es lo que quieres hacer, Lali? No es sobre tu trabajo; es sobre el mío. Creo que él ya se dio cuenta de que estoy protegiéndote. Si tú vas o no, tu trabajo está seguro… por ahora.
Suspiré y recogí la bandeja con el postre. No pondría en peligro el trabajo de otro por ayudarme. —Lo haré.
Sin otra palabra, me dirigí al pasillo por mí misma. Una vez que entré, los ojos azul acero se encontraron con los míos y sonrió.
—Ah, entonces te dejó que vinieras sola. Me preguntaba si en tu lugar lo vería a él.
 No quería sonreír por ese comentario pero lo hice. Puse el postre delante de él y tomé mi lugar.
—¿Tú hablas? —Gaston había hablado por mí toda la noche. —Nosotros normalmente no tenemos jóvenes mujeres empleadas. ¿Cómo lo hiciste para convencer a Mary?
—Soy madura para mi edad.
Sólo asintió y le dio un mordisco a un tipo de pastel de chocolate con más chocolate goteando del interior. Después de que masticó y tragó, me miró otra vez. Volví a mirar por la ventana a las olas rompiendo en la orilla.
—¿Qué edad tienes?
—Diecisiete —Esperaba que mi simple respuesta pusiera fin a su interrogación.
 —¿Cómo supiste que vivo aquí?
Su pregunta me tomó fuera de guardia y me encontré con su mirada.
—Es difícil no mirar las fotos cuando sacaba el polvo y trapeaba.
Frunció el ceño. —¿Aplicaste para este trabajo sin saber que yo vivo aquí? Me di cuenta de que había asumido que era una fan que había pasado a través de las grietas de su seguridad y él quería saber cómo lo había hecho.
—Mi madre ha estado limpiando aquí por dos meses. Sin embargo, su embarazo ha avanzado y me envió aquí en su lugar. Demostré que era digna, y la Sra. Mary me mantuvo. Mi estadía aquí no tiene nada que ver con usted, señor, pero tiene todo que ver con el hecho de que quiero comer y pagar el arriendo —Sabía que sonaba molesta, pero yo lo estaba, y no podía evitarlo. Él asintió y se puso de pie.
—Lo siento. Cuando te vi, y eres joven y bueno… atractiva, pensé que la única razón por la que alguien como tu estuviera trabajando aquí, era para estar cerca de mí. Trato muy poco con mujeres, y asumir que trabajabas aquí para estar cerca de mí no fue justo. Por favor, discúlpame.
Me tragué el nudo en la garganta.
Sentí que este trabajo se me deslizaba fuera de mis manos, pero no iba a llorar.
—Entiendo —Me las arreglé para decir. Una sonrisa de niño apareció en sus labios, y asintió con la cabeza hacia la puerta.
—Supongo que debería haber imaginado que estabas tomada, por la actitud posesiva del otro empleado esta noche. Te miré más de lo que debería, pero me mantuve esperando que preguntaras por mi autógrafo o deslizaras tu número en una servilleta.
Levanté mis cejas en sorpresa. Se encogió de hombros.
—Esas cosas son parte de mi forma de vida. Sólo lo esperaba.
 Le devolví la sonrisa esta vez. No era tan malo como había creído. No iba a despedirme.
—Estoy aquí para hacer mi trabajo, señor, nada más.
 —Hazme un favor y no me llames “señor”. Sólo soy dos años mayor que tú. Tomé el plato, con cuidado para no tocar sus manos, y di un paso hacia atrás.
—Está bien. —respondí, con la esperanza de irme.
—Entonces, ¿Él es tu novio?
Me atrapó con la guardia baja con esa pregunta, y me detuve en seco.
—¿Quién?¿Gaston?
Una sonrisa torcida apareció en su rostro. Era difícil no mirarlo.
— Sí, Gaston es el tipo que se veía muy determinado a asegurarse de que no cometieras errores esta noche, entonces sí.
—No, él es… él es un amigo. —Era extraño decir esas palabras. Nunca había llamado a nadie amigo en mi vida. Peter sonrió y se inclinó para susurrarme en mi oído.
—Espero que algún día me consideres un amigo de esa forma. No tengo muchos de aquellos.
Mi cara se puso caliente, y mi piel se estremeció con su cercanía. Su aliento cálido en mi piel hacía difícil formar las palabras. Tragué saliva, tratando de concentrarme en su comentario y no desmayarme a sus pies como una loca lunática.
—Sólo tengo uno —solté, como una idiota.
Peter frunció el ceño.
—Encuentro eso difícil de creer.
Me encogí de hombros.
—No tengo tiempo para amigos.
Peter dio un paso adelante, abriendo la puerta para mí y sonrió.
 —Bueno, espero que puedas encontrar algún tiempo en tu apretada agenda, porque sucede que necesito un amigo… alguien a quien no le importe quién soy... alguien que se ría de mis bromas cuando no sean graciosas. Si no me equivoco, no te importa el hecho de que estoy en la portada de la revista RollingLanzani este mes, y en las paredes de las habitaciones de todas las adolescentes en América.
Su comentario pareció facilitar mi momentáneo lapso de sentido común por su cercanía, y negué con la cabeza.
—No todas las adolescentes en América. Nunca has visto mis paredes. Entonces, supongo que estás en lo correcto. No me importa.
Me alejé, dejándolo detrás de mí.
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Prengunta :
¿Los capitulos estan bien asi de largo? ¿o los quieren mas cortos?
Como les gustaria que subiera 
¿por dia o por cantidad de comentarios?

Ojala les haya gustado ;) Bss

6 comentarios:

  1. A mi me gustaría capítulos todos los días y que sean un poco cortos nada mas pero linda tu nove :)

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  2. Hola primero que nada Feliz navidad y Feliz año nuevo perdón por no comentar antes es que muchas veces el celular no me deja bueno por empezar Gracias por la otra nove estuvo genial me encanto! Yo quería elegir la primer opción pero no podía comentar pero igual está me gusta con viene está historia =) me encantan los capítulos así de las a

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  3. Feliz 2014! Más más más más más

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  4. otro maaaaaaaaaasssssssss así largo

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  5. Muy buena me quede con ganas de mas te espero por mi blog tengo nove http://amorporcasiangeless.blogspot.mx/
    besos!

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