Capitulo 2
No tenía que ser registrada, e incluso me dieron una carta
para mostrar en la puerta, para cuando llegara de aquí en adelante. Las cosas
se volvían más suaves. Incluso Fran me sonrió una vez. Después del almuerzo, la
Sra. Mary me envió al tercer piso, donde se encontraban la mayor parte de las
habitaciones. Era fácil olvidar la casa de quién limpiaba.
No tenía amigos que
me contaran sobre el trabajo. No pensaba en el hecho de que me hallaba en las
habitaciones donde la estrella adolescente más caliente en el mundo estaría
durmiendo todo el verano, lo que, en realidad, no era un tan gran trato. Entré
en su habitación y di vueltas alrededor.
No era la típica habitación de chico
adolescente. Se veía tan confortable que me pareció extraño.
Una pared tenía bates y pelotas firmadas con diferentes
firmas, mientras que algunos sólo se veían en buen estado. Los jerseys que debe
haber usado en la infancia, estaban colgados en las paredes con orgullo.
Fácilmente podía imaginar al pequeño niño que había visto en las fotografías
ayer, vistiéndose y jugando a la pelota en la ciudad como un chico normal. Hice
una inspección más cercana y encontré imágenes de uno de los equipos en los que
él había jugado.
En las más antiguas, me esforcé para ver cuál de los pequeños
niños era la actual famosa estrella de rock. Cuando parecía tener diez u once
años, lo identifiqué fácilmente. Los jerseys y las imágenes habían sido puestas
en orden por año a partir del jardín de infantes hasta la edad de trece años,
luego se detuvieron. Había sido cerca de un año o un poco antes que recordaba
haber oído su nombre por primera vez en la radio. Pareció llevar una vida
normal hasta el momento en que el sello discográfico lo descubrió.
El espacio arriba de su cama lo apartaba de la habitación de
un chico normal adolescente. Guitarras de todas las formas, tamaños, y colores
estaban colgadas en las paredes. Muchas de ellas autografiadas; algunas
brillaban por ser tan nuevas. Una parecía tener oro verdadero en ella, que no
sería de extrañar si así fuera. Me puse de puntillas y la examiné más de cerca.Decia
Fender en ella. Continué examinando las firmas de las guitarras más caras. Recorrí
mi dedo sobre el nombre Jon Bon Jovi y sonreí. Aparentemente, incluso una
estrella de rock tiene ídolos. En el centro de todas las guitarras colgaba una
pequeña, desgastada. El hecho de que estuviese en el centro de toda su
colección, hacía obvio que debe haber sido la primera y la que más amaba.
Eché un vistazo hacia
la puerta para asegurarme de que nadie estuviera afuera, y luego me puse debajo
de la pequeña guitarra y me imaginé cómo todo había empezado. No era una loca
fan pero ver algo que fue responsable de estimular un sueño parecía casi
sagrado en cierto modo. Mi carro de limpieza sin tocar se encontraba cerca de
la puerta, y sabía que necesitaba ponerme a trabajar. No quería aprender cosas
nuevas, cosas personales sobre él. Lo quería a él, superficial e intocable a
mis ojos. Sabiendo que una vez fue lindo, un pequeño niño con rizos castaños
oscuros y una sonrisa que algún día podía causar un frenesí le hacía parecer
más real y no tan divino. Necesitaba mantener mi interés en él al mínimo. Rápidamente
me moví por la habitación sacando el polvo y barriendo, y luego limpié las
caras maderas. Decidí que sería mejor terminar con esta habitación rápidamente
antes de que me encontrara con cualquier otra cosa que me haga imaginarlo como
el pequeño niño de las fotos
Concentré mis
pensamientos en el futuro y bloqueé los otros acerca de Peter Lanzani.
—Lali, ¿Terminaste ya? La familia ya llegó, y tenemos que ir
a los cuartos de empleados —dijo Fran desde la puerta.
Puse mis artículos de limpieza de vuelta en el carro y me
dirigí hasta la puerta dónde se hallaba una muy nerviosa, Fran.
—Claro, acabo de terminar.
Fran asintió con la cabeza y se dirigió hacia el ascensor,
en el que viajaba el personal de la casa, de un piso a otro, sin ser vistos por
la familia. Fran se apresuró al entrar una vez que se abrió, y empecé a
seguirla cuando una botella de limpiador de cristales se cayó del carro. Saqué
un pequeño trapo y recogí la botella del suelo. Limpié lo que había derramado
lo mejor que pude.
—Rápido, por favor
—Fran llamó, con un tono de ansiedad desde el interior del ascensor.
La familia debía ser dirigida al piso de arriba. Me puse de
pie, y una sensación de hormigueo corrió a través de los pelos de mi cuello. Sorprendida,
me di vuelta y lo vi de pie allí, mirándome.
Ya no era el pequeño
niño de cabellos rizados, en su lugar, estaba la famosa estrella de rock. Me
congelé sin saber qué hacer, ya que mi presencia fuera reconocida tan pronto,
no era algo que la Sra. Mary quería. Una sonrisa apareció a través de su
ridículamente sexy cara, el calor quemaba en mis mejillas, y aparté la mirada,
empujando el carro en el ascensor. No parecía estar enojado de que una
adolescente trabajara en su casa. Su sonrisa parecía divertida. Fran frunció el
ceño cuando le eché un vistazo, pero no dijo nada. Puse mi carro lejos y fui a
informar a la cocina que ya había terminado arriba. La Sra. Mary tenía las
manos en las caderas, esperando que llegáramos. Una conversación silenciosa
ocurrió entre Fran y la Sra. Mary. Después la Sra. Mary asintió, sacó algo de
la mesa y me entregó ropa doblada de color negro.
—Todos usan uniformes cuando la familia está en la
residencia. Además, ya no limpiarás mas la casa, me vas a ayudar en la cocina y
ayudarás al Sr. Greg en los jardines. Sin embargo, esta noche te necesito para
servir la cena. La Sra. Lanzani ha pedido que todos los sirvientes sean vistos
de apariencia atractiva por la familia e invitados. William, el joven que contraté
para ayudar a Gaston en el servicio de la familia, llamó para avisar que estaba
enfermo hace unos diez minutos, y tú eres todo lo que tengo. Has demostrado ser
una gran trabajadora, y pareces tomar en serio el trabajo. Tú edad me preocupa,
ya que el amo de la casa está cerca de tu edad y es un ídolo en los ojos de la
mayoría de las chicas. Mi instinto me dice que significa poco para ti. Espero
que continúes mostrando esa madurez.
En realidad no sabía qué decir después de todo lo que dijo,
así que sólo asentí.
—Bien. Ahora, tienes que usar esto todos los días. Tengo dos
más hechos de tu tamaño, y tienen que ser dejados aquí cada noche para ser
lavados y planchados. Asegúrate de seguir entrando por el mismo lugar y de
inmediato te cambias en el cuarto de lavado. Ahora, necesito que me ayudes a
comenzar a preparar la cena antes de ponerte la ropa. Tienes que estar limpia y
ordenada para cuando sirvas.
En las siguientes dos horas, corté, rebané, agité, y rellené
todo tipo de carnes y vegetales. Por el momento, la Sra. Mary me dijo que fuera
a cambiarme ya arreglar mi cabello, el agotamiento llenó mi cuerpo. Me puse una
falda negra, que llegaba arriba de mis rodillas, y una blusa blanca con botones
y cuello redondo. Me puse un delantal negro sobre mi blusa y falda. Tomando mi
cabello suelto, coloqué mis rizos en lo alto de mi cabeza. Me lavé la cara y
las manos y suspiré viendo mi cara reflejada en el espejo.
El rostro de mi madre
me consiguió un trabajo como servidor esta noche, pero mi personalidad
reservada ganó la confianza de la Sra. Mary. Cuando los ojos de mi madre
brillaban con picardía, los míos se encontraban serios y reservados. La sonrisa
de PeterLanzani me deslumbró tanto como lo hizo en las millones de fotos que
había visto en revistas y en posters. Sin embargo, no significaba que yo sería
lo suficientemente tonta como para ser atraída por él, como el resto del mundo.
Con un profundo suspiro, abrí la puerta y volví a la cocina, donde la Sra. Mary
esperaba.
—Bien, ahora, recuerda, tú te sitúas en el frente del amo
Peter en el momento exacto en que Gaston esté… —saludó a un hombre alto y joven
que aún no había conocido—. Situado frente a la Sra. Lanzani Ustedes serán los
únicos que estén en la mesa esta noche. El Sr.Lanzani y Pablo llegarán mañana,
por lo que esta noche, ustedes dos serán los únicos sirviendo. —Asegúrate de
estar en silencio detrás del amo Peter mientras él come y seguir los pasos de Gaston.
Él te ayudará con cualquier cosa con la que no te sientas segura. Desvié la
mirada hacia Gaston quien parecía ser sólo unos pocos años mayor que yo,
probablemente en la edad universitaria. Su cabello rubio arenoso y sonrientes
ojos verdes inmediatamente me relajaron. Me tendió su bronceada mano y sonrió.
—Gaston Hardy.
Deslicé mi mano en la
suya, y él la sacudió.
-LaliEsposito. Asintió, sin dejar de sonreír, y tomó la
bandeja.
—Miré tu valiente desempeño ayer cuando aseguraste tu
trabajo aquí. Me sorprendió cómo tus ojos pasaron de nerviosos a determinados
en menos de un segundo. — Tomó la bandeja delante de él, sonreí y levantó el
set de bandejas delante de mí. —Puedes seguirme… desde que sirva la comida de
la Sra.Lanzani —
Me dio un guiño antes de girarse e ir en dirección a la
entrada del comedor. La gran sala no era nueva para mí. Había limpiado los
pisos esa mañana. Gaston tomó su lugar detrás de la Sra.Lanzani, que se sentaba
a espaldas de la entrada. La alarma natural en mi cuerpo me avisó cuando
caminaba alrededor para estar detrás de Peter, quien se sentaba en la cabecera
de la mesa. Miré a Gaston para que me guiara. Asintió con la cabeza, y pusimos
las ensaladas en la mesa exactamente en el mismo momento. Di un paso atrás Gaston
asintió para que me quedara al lado de él, así que lo hice.
—Todavía no entiendo por qué Papá está haciendo ir a Pablo a
la entrevista en Yale, si él no quiere ir allí. —La voz de Peter sonaba tan
suave que parecía casi irreal. Me sentí como si hubiera entrado a una película,
y me quedé observando la escena delante de mí.
—Tu hermano no sabe qué es lo mejor para él. Tiene el
cerebro para ser algo más que el hermano menor de PeterLanzani. Puede hacer un
nombre por sí mismo, si sólo se centrara en ello, en vez de pasar el tiempo
jugando con el mercado de valores. Su cabeza para los números se está
desperdiciando. Peter levantó la mirada hacia mí y pareció sonreír antes de
dirigir de nuevo la mirada hacia su madre.
—Los dos van a empujarlo lejos. Estás en lo correcto, él es
inteligente y no necesita que pienses por él. La Sra.Lanzani soltó una corta y
dura carcajada.
—Y tú no estarías dónde estás hoy si yo no te hubiese
presionado tan duro. Todo lo que querías hacer era jugar béisbol con tus amigos
y tocar en una banda de garage sin nadie con talento, exceptuándote.
Peter suspiró,
tomando un trago de su agua con hielo, y se volvió hacia su madre. —Suficiente,
Mamá, no empieces a hablar mal de los únicos amigos verdaderos que he tenido.
La Sra.Lanzani miró hacia atrás, y Gaston tocó mi mano para
llamar mi atención hacia él y la razón por la que me encontraba ahí. Dimos un
paso hacia delante, al mismo tiempo, removiendo los platos de ensalada de losLanzanis.
—¿Podemos conseguir alguna cosa que no sea agua para que
beban con su comida? —preguntó Gaston con un encantador acento sureño.
Me encontré con sus
ojos una vez más mirándome. Luché contra la tentación de permitir que mis ojos
miraran en la dirección de Peter.
La Sra.Lanzani
suspiró. —Supongo que una copa de Merlot no debería herirme —miró a su hijo y
alisó la servilleta en su regazo como si tratara de decidir—. Tráeme una copa
del Merlot que tenemos en la bodega.
Peter se inclinó hacia atrás, y podía ver que seguía
mirándome. Por lo tanto, tomé una calmada respiración y lo miré.
—Si pudiera tener un vaso de té helado dulce de la Sra. Mary
por favor. Asentí y me resistí de regresarle la sonrisa.
—Sí, señor — respondió Gaston.
Dio un paso atrás y movió su mano por lo que me dirigí de
regreso a la cocina. Salí del gran comedor e inmediatamente tomé una profunda
respiración. No me había dado cuenta de lo angustiante que podía ser. Tan
pronto como entré en la cocina, Gaston me sonrió.
—¿Qué?¿Lo arruiné?
Gaston negó con la cabeza, y un mechón de pelo rubio cayó en
sus ojos.
—No, estuviste genial. Ahora vamos a buscar la sopa de
cangrejo, antes de que la Sra. Mary tenga un ataque. —Se giró hacia la ama de
llaves—. Sra. Mary necesitamos el Merlot de la bodega.
La Sra. Mary le entregó la botella ya abierta junto con un
vaso.
—Ya lo había pensado, y aquí está el té dulce de Peter. —Yo
me encargo de las bebidas — dijo Gaston. Me sentía demasiado agradecida como
para preguntar por qué. Sólo asentí y lo seguí por el pasillo hasta el comedor.
Justo antes de que entrara, Gaston se volteó a mirarme. —Ignora que él te está
mirando. Eres un placer para los ojos. No puedo culparlo, pero si quieres
mantener este trabajo, trata de mantenerte invisible. —Guiñó un ojo y luego
abrió la puerta.
Mi objetivo en la vida era volverme invisible. Pensé que
había estado tratando de hacer eso. Aparentemente, necesitaba esforzarme más.
—Tengo la intención de tener un montón de tiempo para
relajarme en la playa. Me gusta el acceso a las playas privadas que tenemos
aquí y la idea de ser capaz de relajarme sin que nadie intente hablar conmigo,
conocerme, o conseguir que firme un autógrafo es algo que he estado anhelando
por un año. Necesito un descanso. Sé que Gregory odia la idea de que no esté
disponible por tres meses, pero lo necesito para mi cordura. —Peter me miró
mientras colocaba el plato de sopa frente a él—. Gracias — susurró.
—Yo también quiero que tengas un descanso Gregory piensa que
un poco de tiempo en frente de tus fans, este verano, seria genial para RP Quizás
podrías hacer un concierto en la playa, o sólo ir a algunos estrenos de
películas. Peter negó con la cabeza
—De ninguna manera, Mamá. Me niego que se sepa que estoy
aquí. Elegí Alabama por qué no es una zona altamente poblada. Mejor aún, esta
pequeña isla es privada. Voy a considerar algunos estrenos de películas, pero
nada más. No te voy a presionar más.
Peter continuó
comiendo, y yo estaba junto a Gaston mirando por la ventana y al bol de Peter
esperando el momento en que tendría que quitarlo. Miré a Gaston, y se encontró
con mis ojos con una sonrisa. Él era todo negocios y me di cuenta de que quería
que lo hiciera bien aquí. Había hecho un amigo. Gaston tocó ligeramente mi
brazo y dio un paso adelante. De inmediato lo seguí y levantamos los boles.
—¿Más té dulce, señor? Peter me miró y deslizó su mirada
hacia Gaston.
—Sí, por favor. En el vaso de la Sra.Lanzani quedaba a lo
más un trago.
Gaston otra vez dio
un paso hacia atrás y me permitió salir primero. Hicimos la misma rutina que
antes. Una vez en la cocina, recogimos las bandejas ya preparadas con las más
ricas y exóticas comidas que jamás había visto.
—Guau, seguro comen
un montón.
—La SeñoraLanzani raramente prueba su comida hasta el
momento, y mi conjetura es que apenas tocará esto.
—Él come todo lo
suyo.
—Sip, pero él es un chico en crecimiento.
Me reí con la imitación de la Sra. Mary que hizo Gaston,
recogí la bandeja, y lo seguí por el ya familiar pasillo. Una vez dentro,
coloqué la comida frente a Peter, otra vez, y Gaston colocó el té dulce por mí.
Peter y su madre comieron en silencio esta vez. Ocasionalmente, sentí que él me
miraba, y un breve toque de la mano de parte de Gaston que sin duda me
recordaba que necesitaba parecer invisible. Nunca miré esos curiosos ojos azul
acero. Madre e hijo intercambiaron unas casuales palabras, pero la mayor parte,
comieron en silencio. Finalmente, después de lo que pareció una eternidad,
inspeccioné a Peter para ver si él había finalizado, y nuestros ojos se
encontraron. Traté de mirar lejos, pero sus ojos tenían un toque de risa. Me
quedé mirando a mis pies, y Gaston me apretó el brazo. Me impresionó. Lo miré,
y asintió para que tomáramos los platos. Limpiamos los lugares en frente de
ellos al mismo tiempo, y caminé hacia la puerta.
—No voy a comer el postre —dijo la Sra.Lanzani a Gaston—. No
me gusta dejarte comiendo solo, pero estoy agotada. Estaré en mi habitación si
me necesitas. Peter se paró cuando su madre dejó la mesa. Una vez que se fue,
se sentó otra vez.
—Me encantaría el postre. —Nos aseguró… o me aseguró a mí. Gaston
asintió.
—Sí, señor —dijo en
su tono serio, y nos fuimos. Una vez en la cocina, Gaston colocó su bandeja. —Bien,
esto es raro. Se supone que tienes que tomar su plato, y desde que su madre se
fue, no tengo razón para volver. Yo podría ir en tu lugar, lo que sería la
mejor idea, pero me temo que se enojará. Te ha notado, y sé que era bastante
inevitable que lo hiciera, pero esperaba que ya que es famoso, no prestaría
atención a otra cara bonita.—Gaston suspiró, apoyó su cadera en la mesa y cruzó
sus largas piernas
— Estoy dejándote esto a ti.
—¿A mí?
—¿Qué es lo que quieres hacer, Lali? No es sobre tu trabajo;
es sobre el mío. Creo que él ya se dio cuenta de que estoy protegiéndote. Si tú
vas o no, tu trabajo está seguro… por ahora.
Suspiré y recogí la bandeja con el postre. No pondría en
peligro el trabajo de otro por ayudarme. —Lo haré.
Sin otra palabra, me dirigí al pasillo por mí misma. Una vez
que entré, los ojos azul acero se encontraron con los míos y sonrió.
—Ah, entonces te dejó que vinieras sola. Me preguntaba si en
tu lugar lo vería a él.
No quería sonreír por
ese comentario pero lo hice. Puse el postre delante de él y tomé mi lugar.
—¿Tú hablas? —Gaston había hablado por mí toda la noche.
—Nosotros normalmente no tenemos jóvenes mujeres empleadas. ¿Cómo lo hiciste
para convencer a Mary?
—Soy madura para mi edad.
Sólo asintió y le dio un mordisco a un tipo de pastel de
chocolate con más chocolate goteando del interior. Después de que masticó y
tragó, me miró otra vez. Volví a mirar por la ventana a las olas rompiendo en
la orilla.
—¿Qué edad tienes?
—Diecisiete —Esperaba que mi simple respuesta pusiera fin a
su interrogación.
—¿Cómo supiste que
vivo aquí?
Su pregunta me tomó fuera de guardia y me encontré con su
mirada.
—Es difícil no mirar las fotos cuando sacaba el polvo y
trapeaba.
Frunció el ceño. —¿Aplicaste para este trabajo sin saber que
yo vivo aquí? Me di cuenta de que había asumido que era una fan que había
pasado a través de las grietas de su seguridad y él quería saber cómo lo había
hecho.
—Mi madre ha estado limpiando aquí por dos meses. Sin
embargo, su embarazo ha avanzado y me envió aquí en su lugar. Demostré que era
digna, y la Sra. Mary me mantuvo. Mi estadía aquí no tiene nada que ver con
usted, señor, pero tiene todo que ver con el hecho de que quiero comer y pagar
el arriendo —Sabía que sonaba molesta, pero yo lo estaba, y no podía evitarlo.
Él asintió y se puso de pie.
—Lo siento. Cuando te vi, y eres joven y bueno… atractiva,
pensé que la única razón por la que alguien como tu estuviera trabajando aquí,
era para estar cerca de mí. Trato muy poco con mujeres, y asumir que trabajabas
aquí para estar cerca de mí no fue justo. Por favor, discúlpame.
Me tragué el nudo en la garganta.
Sentí que este trabajo se me deslizaba fuera de mis manos,
pero no iba a llorar.
—Entiendo —Me las arreglé para decir. Una sonrisa de niño
apareció en sus labios, y asintió con la cabeza hacia la puerta.
—Supongo que debería haber imaginado que estabas tomada, por
la actitud posesiva del otro empleado esta noche. Te miré más de lo que
debería, pero me mantuve esperando que preguntaras por mi autógrafo o
deslizaras tu número en una servilleta.
Levanté mis cejas en sorpresa. Se encogió de hombros.
—Esas cosas son parte de mi forma de vida. Sólo lo esperaba.
Le devolví la sonrisa
esta vez. No era tan malo como había creído. No iba a despedirme.
—Estoy aquí para hacer mi trabajo, señor, nada más.
—Hazme un favor y no
me llames “señor”. Sólo soy dos años mayor que tú. Tomé el plato, con cuidado
para no tocar sus manos, y di un paso hacia atrás.
—Está bien. —respondí, con la esperanza de irme.
—Entonces, ¿Él es tu novio?
Me atrapó con la guardia baja con esa pregunta, y me detuve
en seco.
—¿Quién?¿Gaston?
Una sonrisa torcida apareció en su rostro. Era difícil no
mirarlo.
— Sí, Gaston es el tipo que se veía muy determinado a
asegurarse de que no cometieras errores esta noche, entonces sí.
—No, él es… él es un amigo. —Era extraño decir esas palabras.
Nunca había llamado a nadie amigo en mi vida. Peter sonrió y se inclinó para
susurrarme en mi oído.
—Espero que algún día me consideres un amigo de esa forma. No
tengo muchos de aquellos.
Mi cara se puso caliente, y mi piel se estremeció con su
cercanía. Su aliento cálido en mi piel hacía difícil formar las palabras. Tragué
saliva, tratando de concentrarme en su comentario y no desmayarme a sus pies
como una loca lunática.
—Sólo tengo uno —solté, como una idiota.
Peter frunció el ceño.
—Encuentro eso difícil de creer.
Me encogí de hombros.
—No tengo tiempo para amigos.
Peter dio un paso adelante, abriendo la puerta para mí y
sonrió.
—Bueno, espero que
puedas encontrar algún tiempo en tu apretada agenda, porque sucede que necesito
un amigo… alguien a quien no le importe quién soy... alguien que se ría de mis
bromas cuando no sean graciosas. Si no me equivoco, no te importa el hecho de
que estoy en la portada de la revista RollingLanzani este mes, y en las paredes
de las habitaciones de todas las adolescentes en América.
Su comentario pareció facilitar mi momentáneo lapso de
sentido común por su cercanía, y negué con la cabeza.
—No todas las adolescentes en América. Nunca has visto mis
paredes. Entonces, supongo que estás en lo correcto. No me importa.
Me alejé, dejándolo detrás de mí.
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Prengunta :
¿Los capitulos estan bien asi de largo? ¿o los quieren mas cortos?
Como les gustaria que subiera
¿por dia o por cantidad de comentarios?
Ojala les haya gustado ;) Bss
A mi me gustaría capítulos todos los días y que sean un poco cortos nada mas pero linda tu nove :)
ResponderEliminarHola primero que nada Feliz navidad y Feliz año nuevo perdón por no comentar antes es que muchas veces el celular no me deja bueno por empezar Gracias por la otra nove estuvo genial me encanto! Yo quería elegir la primer opción pero no podía comentar pero igual está me gusta con viene está historia =) me encantan los capítulos así de las a
ResponderEliminarlargos besos Naara
EliminarFeliz 2014! Más más más más más
ResponderEliminarotro maaaaaaaaaasssssssss así largo
ResponderEliminarMuy buena me quede con ganas de mas te espero por mi blog tengo nove http://amorporcasiangeless.blogspot.mx/
ResponderEliminarbesos!